Salud mental perinatal: balance 2025


El año en políticas, investigación e innovación en salud mental perinatal.

Durante 2025, el embarazo y la parentalidad estuvieron en el centro de múltiples conversaciones públicas, con nuevos desarrollos en políticas públicas que generaron tanto interés como debate. Este balance revisa algunos de los hitos más relevantes del año en materia de políticas, investigación e innovación en salud mental perinatal.

Políticas públicas

Varios eventos de alto perfil en 2025 pusieron bajo intenso escrutinio la seguridad de los medicamentos y las políticas de salud perinatal, tanto a nivel público como profesional. A continuación, se presentan algunos de los principales debates y reacciones de organizaciones de salud.

Debates sobre la seguridad de medicamentos durante el embarazo

En julio, un panel de la FDA se reunió para discutir la seguridad del uso de inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), medicamentos ampliamente prescritos para la depresión y otros trastornos de salud mental, durante el embarazo. Diversas organizaciones de salud materna, entre ellas el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (ACOG), expresaron preocupación por lo que consideraron una presentación parcial y una interpretación errónea de la evidencia científica.

Como respuesta, estas organizaciones publicaron declaraciones reafirmando la evidencia disponible que respalda la seguridad del uso de estos medicamentos durante el embarazo, así como los riesgos —frecuentemente invisibilizados— asociados a no tratar la depresión prenatal.

Acetaminofén y preocupaciones sobre neurodesarrollo

En septiembre, el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) y la FDA emitieron un comunicado señalando que “el uso de acetaminofén por mujeres embarazadas podría estar asociado a un mayor riesgo de condiciones neurológicas como autismo y TDAH en niños”. Esta declaración generó amplia cobertura mediática y respuestas inmediatas por parte de organizaciones de salud materna.

ACOG reiteró que el acetaminofén sigue siendo el medicamento de elección para el tratamiento del dolor y la fiebre durante el embarazo, y que la evidencia disponible no respalda una relación causal entre su uso prenatal y trastornos del neurodesarrollo. Según estas organizaciones, no existen fundamentos para modificar la práctica clínica actual.

Cambios en las recomendaciones de vacunas infantiles

Las familias también enfrentaron cambios relevantes en las recomendaciones de vacunación infantil. En diciembre, el CDC y su comité asesor (ACIP) votaron eliminar la recomendación universal de la dosis de hepatitis B al nacer, como parte de un giro más amplio hacia decisiones “basadas en el individuo” en lugar de recomendaciones universales de salud pública.

Numerosas organizaciones expresaron preocupación, señalando que estos cambios no estarían respaldados por la evidencia científica y que el énfasis en la “toma de decisiones compartida” podría generar confusión, mayor complejidad y nuevas inequidades en salud.

Inequidades persistentes en salud materna

Las desigualdades raciales continuaron siendo un eje central en la discusión sobre salud mental perinatal y materna. Datos actualizados del CDC mostraron una disminución de la mortalidad materna en todos los grupos raciales y étnicos, excepto en mujeres negras. En Estados Unidos, las muertes relacionadas con el embarazo en mujeres negras siguen siendo tres veces más altas que en cualquier otro grupo.

El racismo estructural, el abandono sistémico y los sesgos en la atención de salud continúan alimentando estas brechas. Durante 2025, dos casos altamente difundidos evidenciaron estas fallas: mujeres negras en trabajo de parto activo que buscaron atención y recibieron negligencia, maltrato y discriminación. Estos episodios reforzaron la urgencia de avanzar en reformas de salud materna con un enfoque explícitamente antirracista.

Investigación

Salud mental de los padres

En 2025 se publicaron dos estudios pioneros sobre salud mental paterna. El primero, realizado en el Reino Unido, examinó episodios del estado de ánimo en padres con antecedentes de trastorno bipolar durante el período perinatal. Más de uno de cada tres padres (36,2 %) presentó recurrencia de síntomas durante el embarazo de su pareja o en el posparto. Un 41,9 % de estos episodios ocurrió durante el embarazo y un 58,1 % durante los primeros seis meses tras el nacimiento.

Estos hallazgos subrayan la necesidad de monitoreo proactivo y apoyos específicos para padres con antecedentes psiquiátricos durante el período perinatal.

Un segundo estudio exploró la llamada “carga mental” en padres. A partir de entrevistas a 31 hombres, los investigadores identificaron que los padres también experimentan trabajo emocional e invisible asociado a la crianza, aunque lo conceptualizan de forma distinta a las madres. Esta carga se relaciona principalmente con el deseo de ser un padre comprometido y con comparaciones con otros padres y con las madres.

Salud mental materna

Un estudio publicado en JAMA Internal Medicine mostró un deterioro sostenido en la salud mental de las madres en Estados Unidos durante la última década. A partir de datos de casi 200.000 madres entre 2016 y 2023, se observó un aumento cercano al 65 % en los reportes de salud mental regular o mala.

Si bien los padres también mostraron un deterioro, la situación de las madres fue consistentemente peor. Estos resultados vuelven a evidenciar fallas estructurales y la necesidad de invertir en políticas y sistemas que apoyen efectivamente la salud mental materna.

Tecnología e inteligencia artificial en el cuidado perinatal

En 2025, las herramientas digitales y las tecnologías basadas en inteligencia artificial se expandieron rápidamente en el ámbito de la salud, incluyendo la salud mental perinatal. Diversos estudios destacaron el potencial de aplicaciones móviles, sistemas de mensajería, intervenciones web y otras herramientas digitales para monitorear el estado de ánimo, ofrecer psicoeducación y facilitar el acceso a recursos de salud mental.

La inteligencia artificial amplía estas posibilidades mediante el uso de datos de registros clínicos electrónicos o biomarcadores de voz para la predicción de riesgos y la detección temprana de trastornos del ánimo perinatales.

Si bien estas herramientas ofrecen un enorme potencial para ampliar el acceso y mejorar la identificación temprana, persisten interrogantes sobre sesgos algorítmicos y cómo estas tecnologías deben complementar —y no reemplazar— la atención humana y clínica.

Reflexiones finales

El aumento de la atención pública sobre el uso de medicamentos durante el embarazo ha puesto de relieve la necesidad de investigación rigurosa y de información equilibrada. Lo que sigue siendo claro es que las condiciones de salud mental perinatal no tratadas conllevan riesgos reales y prevenibles.

Responsables de políticas públicas, profesionales de la salud e investigadores deben trabajar de forma conjunta para garantizar que las personas gestantes y sus familias reciban información confiable, tratamientos efectivos y una atención equitativa.

FUENTE: PSYCHOLOGY TODAY

https://www.psychologytoday.com/us/blog/preparing-for-parenthood/202512/perinatal-mental-health-2025-year-in-review