¿Qué es un parto respetado?
Es el parto en el que se privilegia tu voluntad y decisión como mujer y se respetan tus tiempos y necesidades. Donde puedes estar acompañada, apoyada emocionalmente y se respetan tus derechos, creencias y autonomía. Donde se le entrega a tu hij@ un ambiente amoroso, tranquilo y seguro para llegar al mundo.
El parto respetado no es sinónimo de parto natural, un parto vaginal con o sin intervenciones médicas o una cesárea necesaria pueden ser igualmente respetuosos y humanizados. El parto respetado tiene que ver con que puedas elegir, conectar y reconocer que es lo que quieres. Tiene que ver con que te sientas escuchada, vista y protagonista de la experiencia. Tiene que ver con que tu parto sea tuyo, tenga que ver contigo y con lo que eres.
Visibilizar el derecho al respeto se ha vuelto una necesidad, ya que, durante muchos años, las mujeres hemos dejado de ser protagonistas de nuestros partos y la experiencia de parir se ha centralizado en un modelo médico donde la mujer es tratada como una paciente sin espacio de opinión, elección o decisión.
¿Cómo tener un parto respetado?
Una de las grandes herramientas que puedes adquirir para tener un parto respetado es la información. Infórmate tú y tu acompañante, lean, aprendan, pregunten, conozcan las etapas del parto, conozcan los protocolos actuales por el COVID-19 y sepan a lo que irán y cuáles son sus derechos. Si conoces, puedes elegir. Si estás informada y sabes qué pasa, puedes decidir.
En segundo lugar, conecta con lo que quieres, necesitas y tiene sentido para ti. Conecta con el placer, que la oxitocina sea tu guía, baila, canta, escucha música, hazte cariño, come lo que te gusta y desde ese lugar de amor conecta contigo y con tu hij@. Mírate y desde adentro visualiza cómo quieres y deseas que sea su nacimiento, qué es lo que quieres cuidar. Que se despierte tu fuego interno del amor más profundo. Y que esto no tenga que ver con cumplir expectativas de otros, ni estándares de afuera. Que tenga que ver contigo, con escucharte y mirarte. Y desde ahí, entrégate a la confianza de que tú sabes parir, que gestaste vida, que eres fuerte y poderosa y que independiente de cuál sea finalmente el camino por el cual tu hij@ nazca, puedes conectar con esa sensación de bienvenida, de amor, de fuerza. Porque todas las formas de nacer se honran, porque todas las formas de nacer pueden ser transformadoras y una celebración a la vida, porque todos los caminos para nacer deben ser desde el respeto, el amor y la dignidad.
Y finalmente, y sobre todo en tiempos de pandemia, donde puede haber muy poco control de lo que ocurre afuera, donde nuestra libertad con el exterior está restringida, el mayor poder que tienes tiene que ver con tu interior y con el nido que puedes armar para recibir a tu hij@, confía en que sólo te necesitas a ti para parir y que tú y tu hij@ saben el camino.
Amparo Izquierdo
Psicóloga Perinatal Equipo Centro SerMujer